El flotador se encuentra dentro del tanque de combustible y tiene la función de medir el nivel de combustible. A medida que el nivel del combustible cambia, el flotador se desplaza hacia arriba o hacia abajo. El movimiento del flotador se traduce en una variación de resistencia en un sensor de nivel de combustible que envía una señal al medidor de combustible en el tablero del vehículo, mostrando el nivel de combustible. Hecho generalmente de materiales livianos y resistentes a la corrosión (como plástico o materiales compuestos), el flotador permanece a flote sobre el combustible.